UN BIENESTAR PARA TODA LA SOCIEDAD

 UN BIENESTAR PARA TODA LA SOCIEDAD

Queridos presentes, hoy debemos proponernos ser grandes como personas, ser mejores como seres humanos, vivimos en pleno siglo XXI, en pleno bicentenario y aún existe la discriminación, por el simple hecho de la diferencias de culturas, creencias, raza o color de piel, entre otros aspectos, cuando no debe ser así, todos somos iguales y debemos promover e incentivar a más personas para que cambien su forma de pensar y erradiquemos la discriminación.

La finalidad de este discurso es lograr la armonía con la sociedad en general, para ello se debe practicar los principios de reciprocidad, complementariedad, respeto mutuo a la soberanía de nuestro país, justicia, equidad, y respeto a la diversidad cultural.

Es  importante hoy en día  el proceso de mirarse a uno mismo hacia dentro para reconocer las creencias y los valores que pueden comportar discriminación inconsciente.

Una buena coexistencia tiene como finalidad dar a conocer tanto los valores como las costumbres que se aprenden desde el hogar para que todos sean capaces de compartir con otros compañeros sin la necesidad de emplear la violencia, creando así un ambiente de equidad y solidaridad en el que se mantiene la cordura.

El reconocimiento de uno mismo puede facilitar el desarrollo de comportamientos de autorregulación que mitiguen la influencia del sesgo en las interacciones con las personas. Como seres humanos es casi imposible no relacionarse con otras personas ya que todos necesitamos relacionarnos con los demás. Desde el momento en que nacemos y llegamos a un hogar empezamos a experimentar nuestro primer encuentro de convivencia.

Vivir de manera sana y adecuada puede ayudarnos a lograr tener una vida social pacífica y placentera.

Debemos respetar los valores de la convivencia y los derechos de las demás personas para así tener éxito al convivir.

Todos unidos debemos ayudar a nuestra sociedad, comunidad y familias, para contar con una convivencia saludable, debemos ser empáticos y que el respeto abunde en todos lados. Lucharemos y lograremos una sociedad con igualdad sin discriminación y el respeto que todo ciudadano debe tener.

Tengan presente esta frase, “Compite contra ti mismo, no contra otros”, no creas que por tener un poco más que otros puedes ser superior.

Les agradezco por su tiempo  y atención, por su enfoque en este discurso que debemos tener en cuenta y realizar buenas acciones para nuestro bienestar en la sociedad.

Me despido con un enorme abrazo a la distancia y recuerden, “No a la discriminación, si a la igualdad”.

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